Angry Birds Space me tiene absolutamente enganchado. La primera entrega del juego ya fue genial con un argumento original y lleno de humor y una mecánica tan simple como bien adaptada a los nuevos dispositivos móviles. El resultado fueron cifras de ventas estratosféricas en cualquiera de las plataformas que ha salido. Rovio sacó ampliaciones y variaciones, pero no ha sido hasta Angry Birds Space que ha publicado una auténtica segunda parte. Y de nuevo tiene sencillez y diversión, pero además, y aunque parezca mentira, tiene originalidad
Lo primero que hay que decir es que el argumento no varía un ápice. De nuevo los cerdos roban los huevos y de nuevo estos pajaritos se enfadarán y buscarán venganza acabando con los cerdos, aunque esta vez no será solo en la Tierra, sino que será en una dimensión espacial. Argumento simple que da la bienvenida a un concepto nuevo para Angry Birds: la atmósfera de los planetas. Algo que no es nuevo en otros juegos, puesto que Nintendo utilizó esta misma característica en los dos Super Mario Galaxy.
En Angry Birds Space la atmósfera de los planetas sirve para hacer niveles mucho más locos, pero sin variar nada una mecánica sencilla de entender. Como en el primer juego tenemos diferentes pájaros con diferentes habilidades. Algunos se lanzan en picado, otros explotan e incluso también se dividen en bandada. Pero a diferencia del primer juego en el que la gravedad afectaba lo justo para saber donde nos lanzábamos, en el caso de Space la gravedad es más bien variable. Si lanzamos uno de nuestros pájaros a través del espacio veremos que van en línea recta, puesto que en realidad no hay gravedad, pero al pasar cerca de la atmósfera de un planeta veremos que la gravedad varía y como cambia la trayectoria de nuestro pájaro, por lo que tendremos que hacer más cálculos para acabar con los cerdos.
Con esta pequeña pero importantísima variación veremos como el concepto Angry Birds crece de forma espectacular, ofreciendo a los jugadores nuevas formas de acabar con los cerdos y, no sólo eso, sino que también veremos cómo es posible mover objetos y hacerlos rebotar dependiendo de si están fuera o dentro de la atmósfera. Todo se hace sin cambiar un ápice la simpleza del control y del concepto. El resultado son horas y horas de diversión con un pequeño y original cambio, pero al final genial del todo.
En cuanto al apartado gráfico, Rovio ha cuidado al máximo el producto y aunque Angry Birds Space cuenta con gráficos en 2D, hay efectos propios del cómic, buenísimas animaciones y si tienes el iPad 3 verás que es un juego perfectamente creado para este producto, puesto que la resolución de las imágenes es impresionante. En cuanto a la banda sonora y los efectos se mantienen los del original, aunque por supuesto con pequeñas variaciones “espaciales”.
Angry Birds evoluciona con acierto
Angry Birds Space es todo un acierto por parte de Rovio. Sin tocar la parte esencial y añadiendo algunos pequeños detalles se consigue un juego de gran calidad y, sobre todo, un título impresionante que es una compra imprescindible para cualquier dispositivo iOS (y totalmente gratis si tienes Android). No tardes más y hazte con este Angry Birds Space. Te esperan horas de diversión.
