Lo que he podido ver en este primer contacto de Dungeon Siege 3 me ha dejado realmente encantado . Con una versión prácticamente final, he podido probar muchas de las características y ya os puedo decir que me he quedado con ganas de más, de mucho más. Y es que Dungeon Siege 3 es prácticamente un rearranque de la saga en la que el juego ofrece el nombre y el marco argumental. Volvemos al reino de Ehb, el escenario del primer juego, pero ahora con un sistema de juego mucho más orientado a la acción y con ligeros toques RPG. Cierto es que esto puede decepcionar a los seguidores de la serie, pero también os digo que este nuevo formato engancha. En mi caso, lo ha conseguido durante horas.
Hay que recordar que cuando salió el primer Dungeon Siege al mercado, se posicionó como una gran alternativa a Diablo, pues tenía características diferenciadoras. No llevábamos un solo héroe, sino un grupo de héroes, teníamos a nuestra disposición una mula de carga donde podíamos depositar objetos y la variedad de escenarios era remarcable. En Dungeon Siege 2 se corrigieron muchos de los defectos del primero en cuanto a jugabilidad y se ofrecía un juego menos líneal, pero lamentablemente el motor gráfico heredado se quedó corto. El título ya no rebosaba la frescura del primer juego y la historia no era tan atractiva.
Pero todo esto es el pasado, la nueva responsable del juego es la desarrolladora Obsidian que ha tenido aciertos considerables (Fallout: New Vegas) con errores también considerables (Alpha Protocol), pero que con Dungeon Siege III, por lo que he visto ha logrado acercarse más al acierto. En primer lugar con la historia, puesto que recupera el mundo de Ehb y concretamente se centra en el restablecimiento de la Décima Legión, uno de los grandes grupos de guerreros defensores del reino. Treinta años atrás cayeron en desgracia y ahora han decidido intentar volver a resurgir en contra de la mujer que intenta acabar con ellos, Jeyne Kassynde, tu gran enemigo. El juego comenzará cuando vayas a un punto de reunión, encontrándolo arrasado. A partir de ahí recorrerás el reino de Ehb en una aventura que ofrecerá un argumento lleno de giros y sorpresas.
Para comenzar la aventura hay que escoger entre cuatro personajes principales. Éste es el primer cambio que notas en este Dungeon Siege 3. Hasta ahora no había clases definidas, sino que se construía al personaje mientras avanzabas, dependiendo de si usabas armas a distancia, magia de ataque, magia de defensa o la espada. Pero en Dungeon Siege 3 esto ya no existe y tienes que escoger entre cuatro personajes diferentes que atienden a las clases guerrero (Lucas), mago (Reinhart), pícaro (Katarina) y acróbata (Anjali) por llamarla de alguna forma puesto que es un personaje muy diferente de cualquiera . Además, cada uno de estos personajes tiene su propia historia, dando más variedad al título.
Eso sí, con este cambio el resultado es que Dungeon Siege 3 se asemeja mucho más a la serie Diablo, aunque cada una de estas clases tienen diferentes habilidades y peculiaridades que, tras probarlas, me han permitido afrontar muchos de los combates con variedad de opciones.
El segundo cambio importante es que el título es mejor jugarlo con un pad. Es un juego pensado para consolas y, de hecho, se puede jugar desde dos perspectivas diferentes: cámara cenital y cámara en tercera persona. Esto hace que Dungeon Siege 3 sea más manejable, pero también es cierto que los seguidores de la saga lo encontrarán menos similar al juego original y muy parecido a un título como Baldur’s Gate Dark Alliance.
Dungeon Siege 3 por otro lado ha hecho algo inaudito y es adelantarse a Diablo 3 en ciertos aspectos. En los vídeos que ha publicado Blizzard se ha visto cómo cuando el personaje eliminaba a los enemigos, caían esferas que permitían avanzar más rápido, puesto que curaban vida. Esto ya está en Dungeon Siege 3, haciendo que el juego sea mucho más frenético, aunque eso sí, nada sencillo, porque como en cualquier Action-RPG que se precie el número de enemigos es elevado y en el caso de Dungeon Siege 3 también su variedad. Nos enfrentaremos a grupos con enemigos que nos atacan a distancia , otros que lo hacen cuerpo a cuerpo y algunos que son simplemente enormes. Por supuesto, la IA no existe y se suple con un elevado número de rivales.
En cuanto a los escenarios y por lo que he jugado, Dungeon Siege 3 es muy, pero que muy variado. He recorrido bosques, ciudades al más puro estilo goblin (mecanizadas), criptas e incluso ciénagas. Uno de los que más he disfrutado es una montaña llena de nieve y ventisca que estaba tan bien realizada que casi tiritaba como el personaje. Y es que el apartado técnico del juego es bastante impresionante y lleva a la saga al siguiente nivel gráfico. Utilizando las últimas técnicas, Obsidian consigue un juego increíble.
Algunos de los nuevos niveles han conseguido dejarme con la boca abierta, puesto que los escenarios están realizados con todo lujo de detalles como ver el musgo en las criptas o no saber cuándo es agua o tierra en la ciénaga. Los personajes también ofrecen un gran nivel de detalle y, por supuesto, cuando cambiamos de ropa, también cambia el modelo de Éste. Más remarcables son los efectos visuales de las habilidades que no se limitan solo al mago, lo cual siempre es de agradecer puesto que es algo muy habitual.
En cuanto al sonido, la banda sonora me ha parecido buena y que acompaña perfectamente la aventura por las tierras de Ehb. Los efectos son también muy notables en esta versión de Dungeon Siege 3.
En resumen, Obsidian ha rehecho prácticamente por completo lo que es Dungeon Siege. Con esta tercera entrega te vas a encontrar con un action-rpg puro y duro en el que controlas a un personaje que se tiene que enfrentar a muchísimos enemigos en diferentes elementos. De momento lo que he visto me ha gustado y sobre todo, me dan ganas de seguir jugándolo. Sólo espero que la versión final sea tan buena como la que he visto.
