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¿Qué ha aprendido Facebook de Google+?

Iván Ramírez

Iván Ramírez

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Google y FacebookFacebook nunca ha dudado en hacer cambios en su red social, siendo estos más o menos populares. Sin embargo, desde que apareciera en escena Google+, el enésimo competidor por la plaza de red social dominante, parece como si hubiera aumentado el ritmo de novedades.

Hace unos días, en nuestro debate sobre si hay demasiadas redes sociales, ya apuntábamos una de las ventajas de la existencia de alternativas: mayor competencia y por tanto más y mejores funciones. Pero parece que Facebook no se ha quedado de brazos cruzados y ha afrontado el reto de mantenerse como la red social más importante.

A continuación listamos lo que Facebook ha aprendido gracias a la aparición de Google+.

1. No hay que dormirse en los laureles

Resulta lógico relacionar la cantidad de actualizaciones sucedidas en Facebook en las últimas semanas con la presentación y gran revuelo que ha supuesto la llegada de Google+.

La red social de Zuckerberg ha sido sometida a una gran presión y criticismo desde entonces, teniendo que enfrentarse a unos usuarios cada vez más exigentes que demandan un mayor control sobre sus publicaciones. ¿La solución? Conceder a los usuarios lo que están pidiendo… o perderlos.

2. El chat no es suficiente

En los inicios el chat de Facebook no pasaba de ser una función casi anecdótica: lo molesto que resultaba cuando alguien te escribía era sólo equiparable a la cantidad de veces que fallaba.

Mucho ha mejorado desde entonces, y ahora se usa el chat de Facebook como cualquier otro programa de mensajería, pero el texto se queda corto: la gente quiere hacer llamadas de voz y vídeo.

La llegada de Google+ y sus Quedadas (o Hangouts) no hacía sino resaltar este punto, y Facebook presentaba su función de videollamadas unos pocos días después. Ahora bien, las comparaciones son odiosas y mientras que las videollamadas de Facebook fallan con frecuencia, más fiables resultan las de Google+, con el atractivo añadido de poder charlar con varias personas a la vez, integración con Google Docs y pizarra compartida, llamadas desde el móvil, compartir pantalla…

3. Las opciones, a mano

Las opciones de Facebook parecen tener vida propia. Cambian, mutan y se mueven de un sitio a otro, tratando de ampliarse al mismo tiempo en el que, paradójicamente, intentan simplificarse.

Esto ha ocasionado que haya una gran separación entre la configuración de un elemento y el propio elemento en sí. Por ejemplo, con anterioridad podías editar tu relación sentimental en un sitio (Editar perfil), y quién podrá ver esa información en otro (Configuración de privacidad).

Google decidió integrarlo todo en un mismo sitio: ver tu perfil, editarlo y decidir quién podrá ver cada apartado, y a Facebook parece haberle gustado la idea, ya que ahora la edición del perfil y su privacidad están unidas.

Edicion privacidad

4. Simple, mejor

“Donde caben dos, caben tres” parece haber sido la filosofía de Facebook hasta la fecha en cuanto a tipo de publicaciones se refiere. Se empieza publicando pequeños mensajes de texto a modo de actualizaciones de estado y se termina con enlaces, fotos, preguntas y check ins en lugares.

El resultado era una ristra de opciones y botones que superaba lo deseable. Con Google+ llegaría un nuevo concepto: “una cosa no quita la otra“, y es que puedes establecer tu localización en cada publicación, una función que también tienes disponible ahora en Facebook.

Estados

5. ¿Quién puede ver esto?

Entonces los amigos de mis amigos y los amigos de la persona que he etiquetado, más el primo segundo de los primeros y la portera del quinto podrá ver esta foto…” es una frase que podría haberse aplicado al Facebook de hace unos meses.

Aunque conozcas la teoría y te hayas configurado la privacidad a tu antojo, siempre queda la duda de quién puede ver una publicación específica. Google+ acabó con esta ambigüedad, y ahora también lo ha hecho Facebook, con el añadido de que puedes cambiar la configuración de publicaciones pasadas en cualquier momento.

Compartido con

6. Los juegos son una cosa; las actualizaciones de estado otra

Un vistazo por tu portada de Facebook te revelará uno de los retos a los que se enfrenta: la sobredosis de información no relevante y publicaciones de juegos y aplicaciones. Alguien ha encontrado un tesoro, ha subido de nivel o ha recolectado unas zanahorias que estaban deliciosas… No parece muy interesante.

Google+ mantiene publicaciones normales y juegos en dos apartados distintos. Sí, quizá hayas superado tu record personal de Angry Birds un millón de veces, pero nadie lo verá salvo que esté en la sección de Juegos.

Barra lateralFacebook aún no ha hecho una distinción similar, pero parece estar enfocando sus esfuerzos en ello. Por una parte, con la creación de la barra lateral de juegos donde se muestran las últimas noticias en el mundo gamer de tu Facebook: quién está jugando a qué, qué objetivos ha conseguido, etcétera.

Parece claro que esto librará nuestro Facebook de publicaciones innecesarias en un futuro, aunque mientras ese día llega, hay otra mejora reciente relacionada: las suscripciones.

Las veremos más adelante, pero uno de los “efectos secundarios” de las suscripciones es la posibilidad de elegir el tipo de actualizaciones que quieres recibir de cada persona (o lista), pudiendo elegir entre acontecimientos importantes, actualizaciones de estado, fotos y vídeos, juegos, comentarios y me gusta y otros tipos.

De este modo, puedes dejar de recibir las publicaciones relacionadas con juegos de alguien muy “jugón” desmarcando Juegos. Todo un avance, pues tus opciones hasta ahora eran o bien ocultar todas sus publicaciones… o eliminarle de tu lista.

Suscrito

7. Las amistades recíprocas son cosas del pasado

En el ámbito de las redes sociales se usa la palabra amigo porque utilizar “personas de las que quiero saber qué hacen porque los conozco mínimamente o me gustaría conocerlos o al menos espiar en qué andan” es demasiado largo.

La realidad es que habrá personas a las que no les importe que conozcas lo que están haciendo, pero que no tengan el menor interés por saber de tu vida. Por ejemplo, perfiles de personas famosas que obviamente no pueden prestar atención a sus millones de fans.

SuscribirEl concepto de seguidores y seguidos es muy de Twitter, pero Google+ lo ha adoptado también, en sus círculos. Desde hace unos pocos días, Facebook también te permite seguir a personas sin que estén en tus contactos: las subscripciones.

Las subscripciones abren todo un nuevo mundo en Facebook. Desde ahora, ocultar las noticias de alguien equivale a anular su subscripción (que no implica dejar de ser amigos).

Además, como hemos visto en el apartado anterior, puedes elegir cuántas actualizaciones vas a recibir de cada persona, así como la naturaleza de las mismas.

En resumen, las subscripciones separan el concepto de amistad con el de recibir noticias sobre determinadas personas, y te permiten personalizar qué quieres ver, sin tener que aceptar el paquete completo, o nada, como sucedía antes.

8. La amistad tiene distintos niveles

En cualquier caso, no todos tus amigos (en terminología de Facebook) son igual de amigos. Algunos serán familiares, otros colegas de toda la vida y también habrá compañeros de trabajo o gente a la que apenas conoces.

Uno de los pilares de Google+ son los círculos, que no son más que listas de contactos. En Facebook ya existían las listas desde antes, pero no se estaba aprovechando todo su potencial, en parte por no estar muy a la vista (ver próximo punto).

Entonces es cuando las listas vuelven pisando fuerte y potenciadas con algo de inteligencia, o esa es la idea. Se trata de las listas inteligentes, donde se agrupa tu familia, compañeros de trabajo y colegio o la gente que vive cerca de ti.

Lista inteligente

Estas listas, unidas a la funcionalidad que teníamos de antes y a la potencia de poder elegir qué actualizaciones quieres recibir suponen una gran diferencia. Por ejemplo: puedes elegir saberlo todo sobre tus amigos más cercanos, y recibir sólo unas pocas noticias de conocidos u otras personas.

Además, puedes comentar cosas de ámbito local con la gente que vive cerca de ti, y de este modo no molestar a los que están lejos y no saben de qué estás hablando.

9. Si no está a la vista es como si no estuviera

Facebook es una red social madura y en todo este tiempo ha ido acumulando muchas funciones: el problema es dónde ponerlas, como ya hemos visto en los puntos 3 y 4.

Ver como De entre los ejemplos de recolocación que se han sucedido recientemente, destacamos el botón Ver como… antes enterrado en las opciones de privacidad, ahora en el perfil, y las listas, antes prácticamente escondidas y ahora omnipresentes.

10. Las redes sociales son alimento para el ego

En Twitter coleccionas followers y RT; en Google+, gente que te ha añadido a sus círculos, +1 y comparticiones de tu contenido, y en Facebook lo que se lleva es presumir de tener miles de amigos y “me gusta”.

Hasta ahora cuando publicabas algo interesante en Facebook, sólo te quedaba regocijarte en cuántos comentarios y “me gusta” habías recibido, pero si la gente lo volvía a compartir, no podías tener gran control sobre ello. Sin embargo, ahora Facebook muestra un contador con la cantidad de personas que han compartido un contenido.

Además, no nos olvidemos de las subscripciones. Si las has activado para tu cuenta, ahora tienes un elemento más para sentirte orgulloso: cuántas personas se han suscrito a tus actualizaciones públicas.

Para terminar, no nos olvidemos del perfil de usuario, la página en la que algunos intentan vender lo “cool” que son, y es que hay otros pocos lugares donde puedas alardear tanto como en tu perfil. Éstos también van a cambiar, introduciendo la cronología (o timeline). Todo un culto al “yo”.

¿Qué opinas de los últimos cambios en Facebook?

Iván Ramírez

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